Perdónate, no seas tan duro contigo mismo. Reflexión corta
Perdónate, no seas tan duro contigo mismo.
Tal vez te arrepientes de algunas cosas
que hiciste tiempo atrás
es probable que no hayas tenido
la experiencia de ahora ni la sabiduría.
Perdónate, gracias a Dios que ya has aprendido
y hoy puedes tomar decisiones mejores,
con más sabiduría, con más cuidado.
Y si aún no pudieras tomarlas
igual necesitas perdonarte
porque el peor enemigo que puedes tener
eres tú mismo, una mente que te culpa
una y otra vez por lo que no hiciste bien.
Si Dios perdonó nuestros errores
cuando aceptamos el sacrificio de su hijo Jesús,
y si aún nos perdona hoy,
Por Mery Bracho